Una como espectadora y otra como trabajadora

Dos manzanareñas acompañaron a Blanca Romero en la final del Mundial

Sandra Mascaraque y Adriana López de los Mozos estuvieron en el Accor Stadium de Sídney (Australia) el domingo celebrando la victoria de España

17.666 kilómetros separan Manzanares del Accor Stadium de Sídney (Australia). A pesar de la distancia, Manzanares estuvo presente en la final del Mundial 2023 en la figura de Blanca Romero. Sin embargo, la preparadora física de la Selección Española no fue la única manzanareña que estuvo en el estadio: Sandra Mascaraque y Adriana López de los Mozos también vivieron, cada una a su manera, este momento que ya ha pasado a la historia del fútbol español.

Sandra, de 24 años, llegó a Sídney hace un año y medio “para seguir formándome como traductora e intérprete”. Consiguió entradas para la final “casi por casualidad” porque en un primer momento no se enteró de que se habían puesto a la venta las entradas para los partidos del Mundial y cuando España consiguió el billete para el último encuentro ya estaban agotadas. “Ya sin esperanzas, la tarde anterior a la final me metí en internet por probar... ¡y encontré premio!”, explica a Manzanares10TV. Y desde uno de los fondos, armada con una pancarta en la que se leía “¡Vamos, España! Saludos a Manzanares”, disfrutó del choque entre España e Inglaterra (1-0). “El final me pilló por sorpresa porque en el estadio no había forma de saber cuántos minutos de descuento restaban. Cuando lo escuché el silbato me quedé sin poder reaccionar. ¡No me podía creer que éramos campeonas del mundo!”.

El caso de Adriana, de 28 años, es distinto. “Madrileña de nacimiento pero manzanareña de corazón” lleva siete meses viviendo en Australia una experiencia “que me está cambiando la vida”. Entre esos momentos memorables guardará los del domingo, que todavía le hace tener “los sentimientos a flor de piel”: trabajó como camarera en uno de los palcos VIP del estadio en el que se disputaba la final del Mundial 2023. “Teníamos prohibido estar pendientes de lo que sucedía en el césped, pero tuve la gran suerte de que mi descanso coincidiera con los últimos partidos del partido”, comenta por videollamada desde Australia. “¡Hasta que no vi a las jugadoras levantar la copa no volví a mi puesto!”.

Ni Sandra ni Adriana tuvieron oportunidad de compartir unos instantes con Blanca, pero esta última sí que intercambió unos mensajes con ella la noche anterior al partido. “Le deseé toda la suerte del mundo y le dije que iba a tener una paisana animándole desde el estadio. Y, para mi sorpresa, me contestó. Seguro que tenía el móvil echando humo, así que es para recalcarlo y darle las gracias infinidad de veces”. En lo que sí coinciden ambas es en “el orgullo” que sintieron al saber que una manzanareña estaba “haciendo historia” y llevando el nombre de Manzanares “a lo más alto”.