El anhelo que manzanareños de uno y otro lado del Atlántico tienen desde hace años de hermanar el municipio manchego de Manzanares con el colombiano de Manzanares de Caldas ha dado un nuevo paso esta semana. El párroco de la localidad cafetera ha estado en nuestra ciudad.
El sacerdote Martín Ortega, de viaje estos días en España, ha hecho una parada para conocer Manzanares y avanzar en el hermanamiento que esta ciudad tiene con Manzanares de Caldas, el municipio colombiano del que es párroco. Y de lo que ha visto de este Manzanares le ha gustado por ser “muy acogedor, bonito y por tener una amplia historia que también se ve reflejada en la cultura que vivimos, en las tradiciones, en la religión y en las imágenes religiosas y valores cristianos”.
Ortega, que reconoce que sus parroquianos son muy religiosos, ha aprovechado su estancia en el Manzanares español para entrevistarse con sus homólogos de las parroquias manzanareñas y estrechar lazos de cara al hermanamiento de estos municipios homónimos. “El objetivo es tratar de unificar criterios y poder hacer acciones de solidaridad, cultura, educación y formación”, explica.
El párroco de Manzanares de Caldas ha estado acompañado por Manuel Gómez, el manzanareño español que en los últimos años más ha apostado por estrechar lazos con el municipio colombiano fundado en el primer tercio del siglo XIX y que debe su nombre a un vecino de Manzanares. “Dentro del plan del hermanamiento está también unir las iglesias de ambos Manzanares”, señala Gómez.