‘La Ciudad Educadora trabaja para no dejar a nadie atrás’. Es el lema con el que la Asociación Internacional de Ciudades Educadoras, a la que pertenece Manzanares, conmemora este 30 de noviembre el Día Mundial de la Ciudad Educadora. El Ayuntamiento se suma a esta celebración y se compromete a cumplir ese objetivo de “no dejar a nadie atrás”.
En el manifiesto publicado este 30 de noviembre desde la concejalía de Educación, se expone que la pandemia ha acentuado desigualdades preexistentes y ha añadido nuevas barreras y obstáculos a la equidad. Por ello, “ante el reto que presentan estas nuevas y viejas formas de exclusión social”, el Ayuntamiento de Manzanares recuerda que la educación “se erige como uno de los pilares fundamentales para el desarrollo de estrategias que favorezcan la inclusión y eviten la segregación social”, capaz de promover cambios culturales.
Convencido del “potencial transformador de la educación”, el Ayuntamiento apuesta por políticas proactivas y preventivas para favorecer la inclusión y la equidad desde todas sus concejalías y, como Ciudad Educadora, Manzanares se compromete a articular respuestas multidimensionales innovadoras “que permitan desarrollar las competencias personales y sociales del conjunto de la ciudadanía, sin exclusiones”.
En este manifiesto, también se apuesta por el éxito educativo del conjunto de la ciudadanía y por la mejora de la calidad del sistema escolar “puesto que la escuela juega un rol central en la reducción de las desigualdades”. Con todo ello, concluye el texto, “aspiramos a crear un municipio libre de segregaciones y barreras físicas y mentales, accesible e interconectado para toda la ciudadanía, y a crear espacios de convivencia en los que puedan interactuar personas muy diversas”.