Con el fin de asegurar el cumplimiento de la normativa correspondiente a los vados permanentes, la Policía Local de Manzanares ha puesto en marcha una campaña de vigilancia. Mediante la comprobación de las placas de vado, se informará a aquellos propietarios que no tengan correctamente señalizada su plaza de aparcamiento, procediendo así a retirarla o instalar una que se ajuste a la normativa.
El vado permanente es una licencia que concede el Ayuntamiento a propuesta de los servicios municipales correspondientes y tras cursarse solicitud por parte de los propietarios de los inmuebles a los que se ha de permitir el acceso. Según la ordenanza municipal de tráfico, las placas deberán estar instaladas en la puerta o fachada; compuestas por un disco R-308, de prohibición de estacionamiento ajustado al modelo oficial que será facilitado por el Ayuntamiento previo abono de las tasas correspondientes en las que constará el número de licencia.
Con el fin de garantizar el cumplimiento de esta normativa, la Policía Local pone en marcha una campaña de vigilancia e información a la ciudadanía tras detectarse algunas irregularidades en la señalización de determinadas puertas de salida de vehículos. Aquellos propietarios que no cumplan con la legalidad vigente en este sentido, deberán retirar estos carteles o rótulos y -si así lo consideran- adquirir su placa de vado con su correspondiente distintivo.
Además de este operativo, desde el Ayuntamiento se está trabajando para unificar las placas de vado, de manera que sea más cómodo para el usuario solicitar este tipo de autorización municipal. Así, habrá una única señal que ya incluirá la licencia. Por el momento, se mantiene el sistema habitual. El propietario deberá adquirir, por un lado, la señal de vado permanente y, por otro lado, solicitar en el Ayuntamiento la placa que acredita su validez.
Por lo que respecta a la normativa, que se puede consultar en la ordenanza municipal de tráfico, es importante recordar que está prohibido el aparcamiento en el vado de cualquier vehículo, incluso el del titular del propio vado. Los propietarios están obligados, además, a mantener en óptimas condiciones los accesos al inmueble; realizar los pagos de las tasas correspondientes; así como devolver la placa normalizada de vado en el Ayuntamiento una vez se haya solicitado la baja o anulación de esta autorización.