El equipo senior masculino del Club Balonmano Manzanares vivió el sábado uno de sus momentos deportivos más tristes al consumarse en la última jornada su descenso a la segunda división territorial. Tenía que ganar su partido y esperar que el Azuqueca no ganara el Pozuelo. No se dio lo uno ni lo otro.
Abatidos y sin consuelo posible. Las lágrimas afloraron en los jugadores del BM Manzanares senior masculino al finalizar su último partido de liga. Este equipo, que hace seis años consiguió el ascenso a la categoría de bronce del balonmano español, en la que se mantuvo tres temporadas, vivió este sábado un amargo descenso a la última categoría del balonmano regional. “El vestuario está hundido. Teníamos mínimas posibilidades y no se ha conseguido el objetivo”, declaró al finalizar el encuentro Moncho Peco, entrenador del BM Manzanares.
Las posibilidades que tenía el Señorío de Guadianeja BM Manzanares de mantenerse en la primera división territorial se esfumaron tras perder ante el BM Herencia por 21-25 en el partido disputado en la tarde del sábado en el pabellón Antonio Caba. Tampoco le hubiera servido la victoria ya que su rival por eludir el descenso, el Azuqueca, ganó al Soliss Pozuelo por 21-30.
Una semana antes, al perder de uno en Azuqueca y dejar de depender de sí mismo para salvarse, Alejando Díaz-Peñalver fue uno de los más afectados. Este sábado, tirando de veteranía, a ‘Peña’ le tocó consolar a sus compañeros. Valoró esta complicada temporada. “Han sido muchas bajas por la pandemia, pocos entrenamientos, jugadores que nos han dejado… Ha sido una temporada dura”, explicó resignado.
Ni los siete goles que consiguió ‘Peña’ ni los otros siete que anotó Blas Díaz ante el Herencia sirvieron para evitar que el colista ganara en el Antonio Caba por 21-25 en uno de los partidos más complicados, por lo extradeportivo en tan atípica temporada, que los locales han afrontado en los últimos años.
Y eso se notó. Tras comenzar por delante, los visitantes remontaron, se fueron con ventaja al descanso y, tras una breve reacción local, volvieron a abrir brecha hasta el final. El BM Manzanares erró muchísimo lanzamientos de siete metros y otras ocasiones claras se estrellaron en la madera o en el portero del Herencia.
Según Moncho Peco, este último partido “es un resumen de todos los errores que hemos tenido durante el año”. El entrenador dijo que fue un partido muy complicado de jugar en el que “lo difícil era darlo todo, pero nos hemos dejado todo”.
Sin embargo, ‘Peña’ considera que este año no se ha competido “en los partidos que había que competir”. De mirar hacia arriba al inicio de la liga, el equipo se complicó la existencia derrota tras derrota. “Por fin ha terminado la temporada. Ya veremos la que viene la categoría en que estemos y los que estemos”, concluyó Alejandro Díaz-Peñalver.
Con una plantilla mermada con solo cuatro jugadores con experiencia y sin una cantera que empuje lo suficiente, la falta de continuidad en los entrenamientos y las bajas que se han ido produciendo en el equipo senior han desembocado en esta situación en la que el entrenador valoró el esfuerzo y compromiso de quienes se han mantenido al frente hasta el final. “A pesar de todo, hemos competido hasta el último partido”, concluyó Peco.
En el Club Balonmano Manzanares llega el momento de reflexionar, de levantar el ánimo y de seguir luchando por un deporte que en las últimas décadas ha dado tanto y tan bueno a nuestra ciudad.
