El 5 de diciembre se conmemora el Día Internacional del Voluntariado; una fecha en la que poner de relieve la dedicación de millones de personas que desinteresadamente realizan acciones en favor de otros, bien sea los más vulnerables, las personas enfermas, los animales o el medio ambiente. En Manzanares, esta fecha se ha conmemorado con un encuentro de voluntariado a modo de visita turística en la que han participado personas pertenecientes a diferentes organizaciones de la localidad, y un grupo de voluntariado de Argamasilla de Alba encabezado por su concejala de Servicios Sociales.
Prado Zúñiga, la homóloga en el Ayuntamiento de Manzanares, los recibía esta mañana en la Plaza de la Constitución para “hacer visible y agradecer públicamente” las actividades que cada uno de ellos realiza en sus entidades. En este sentido, Zúñiga resaltaba que “el voluntariado reúne muchos valores, un compromiso firme, la generosidad, calidad humana, y sobre todo esa labor generosa y altruista que hoy es bueno que se ponga en valor, porque es muy importante ese trabajo que también nos complementa a las administraciones y que ellos hacen extraordinariamente bien”.
Además, la edil manzanareña ha señalado que el voluntariado “hace justicia social, y colabora con quién no lo tiene fácil en la vida”, por lo que reconocía este trabajo y el de sus organizaciones. Para terminar, deseaba que tuvieran un buen día en la localidad visitando la Plaza de la Constitución, el Castillo de Pilas Bonas, y dos de sus museos, antes de finalizar con una comida de convivencia.
Entre los participantes, un grupo de ‘Mayores y compañía’ del Centro de Día de Argamasilla de Calatrava se sumaban a esta jornada en la que también ha participado la Asociación Española Contra el Cáncer, Punto XIX, Cruz Roja, o Estamos Contigo, entre otras entidades. Cristina Carretón, concejala de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Argamasilla de Alba mostraba su agradecimiento por compartir este día en Manzanares, y hacer este reconocimiento al voluntariado, “hacen una labor maravillosa, y hoy el día es para ellos y darles las gracias”. Aunque asegura que “manos siempre hacen falta”, resaltaba el carácter solidario que también tiene su población “tenemos la suerte de tener un pueblo muy solidario y voluntario”.
Agustín Cano, voluntario desde hace 17 años en la residencia de mayores ‘Los jardines’, asegura que “todos los días, a las once menos cuarto, voy a la cocina a por el carrillo y llevo a los mayores su zumo y les entretengo durante unas horas”. Satisfecho con la labor que realiza, asegura que “somos una familia allí, también con los compañeros y compañeras y las personas usuarias, que ya nos conocen”.
Por su parte, Manuela Fernández-Pacheco, Voluntaria Vicenciana ha detallado que su organización nació para acompañar a los mayores en su última época de la vida, “y celebramos su fiesta de cumpleaños, Navidad, fiestas patronales...”. Asegura que los usuarios y usuarias participan en todas las actividades que se realizan, algo que agrada a su voluntariado que también colabora en el proyecto de ropero social, “se creó hace seis años y está enfocado a personas con pocas posibilidades”. La ropa que reciben se vende a precios simbólicos que rondan el euro, y luego el dinero que se recuda se dona a ONGs como Manos Unidas, Cáritas u otras que lo soliciten.