La ilusión ha superado a la incertidumbre en la vuelta a clase seis meses después, marcada por una relativa “normalidad”. Más de 3.000 estudiantes de Manzanares viven desde este miércoles un inicio de curso diferente, escalonado, con mascarillas y sin besos ni abrazos en los reencuentros. Desde los colegios e institutos han lanzado mensajes de tranquilidad y han agradecido la concienciación de toda la comunidad educativa en el cumplimiento de las medidas frente a la COVID-19.
La entrada escalonada programada por los centros educativos manzanareños ha evitado las habituales aglomeraciones en sus accesos a primera hora. Poco a poco, y según los horarios y turnos previstos estos días, alumnado y familias han llegado puntuales a una cita que, a pesar de la incertidumbre provocada por la crisis sanitaria, todos deseaban.
Antes de entrar al cole, los más pequeños no podían ocultar su ilusión tras la mascarilla y demostraban mucha concienciación ante esta singular situación. Para las familias, dentro de la lógica preocupación, lo importante ha sido volver a las rutinas y que se cumplan todas las medidas preventivas que se han establecido.
Entre las novedades de este inicio de curso tan distinto están la prohibición de aparcamiento ante las puertas de entrada a los colegios, a cuyo interior solo han podido acceder los alumnos, guiados por el profesorado para seguir los itinerarios establecidos.
Para los docentes, este inicio de curso también es un auténtico reto, ha reconocido Isabel Cuenca, directora del CEIP Altagracia, con muchas medidas preventivas y de reorganización con el fin de cumplir todos los protocolos. Este colegio público es el mayor de la localidad con más de 400 alumnos y 37 profesores. Las medidas adoptadas han funcionado en este primer día “gracias también a la colaboración y concienciación de las familias y alumnado”, según Cuenca.
En los colegios concertados también se han seguido escrupulosamente las instrucciones de la Consejería de Educación y han desarrollado los respectivos protocolos de prevención, marcando itinerarios de entrada y salida, manteniendo la distancia entre el alumnado e incidiendo en la desinfección de las manos, además del uso obligatorio de mascarilla.
En el caso del colegio ‘La Milagrosa’ han contado también con el apoyo de la Policía Local. Su directora, Ana María Patón, ha agradecido por ello la colaboración del Ayuntamiento de Manzanares, que además ha habilitado pasos de peatones y ampliado zonas para que las familias esperen a sus hijos. Como en el resto de colegios, Patón ha transmitido a las familias un mensaje de tranquilidad ante este nuevo curso en el que se prioriza, ante todo, la salud.
Institutos
El inicio de curso ha coincidido este año en colegios e institutos. En los centros de Secundaria, Bachillerato y FP es aún más escalonado y el alumnado se incorpora a las aulas progresivamente entre el miércoles y el viernes.
En el IES Azuer, con más de 700 alumnos matriculados, este miércoles ha sido un día doblemente especial para quienes empezaban una nueva etapa educativa en el instituto. El alumnado de primer curso de ESO ha sido recibido y guiado por las instalaciones para conocerlas y tomar nota de las medidas especiales que se han adoptado.
Ha sido una vuelta a clase diferente y deseada en la que por encima de la incertidumbre está la ilusión de estudiantes y docentes. “Ilusión y pasión ante un nuevo curso”, según la directora del centro, María Criado, que igualmente ha transmitido un mensaje de tranquilidad a la comunidad educativa.
Entre otras medidas, además de las higiénicas, en el IES Azuer se han establecido itinerarios específicos, se ha distribuido al alumnado por zonas y en grupos estables y se ha diseñado un recreo en el patio y otro en el aula. El objetivo es minimizar el contacto entre estudiantes de distintos grupos.
Este miércoles también ha sido la vuelta a clase en el IES Sotomayor, que cuenta con casi 500 alumnos. En este caso, la presentación ha sido para alumnado de Bachillerato. El de 3º y 4º de ESO tiene su cita el jueves y el de 1º y 2º el viernes. Estos días se aprovecha para explicar las normas e itinerarios establecidos con el fin de comenzar “al cien por cien” el próximo lunes, según su director, Rafael Benítez.
El alumnado del Sotomayor ha encontrado itinerarios marcados por cursos para acceder al interior del centro. Otras medidas para evitar desplazamientos y contactos entre alumnos son la división del instituto por zonas, incluidas las de recreo.
Debido a la antigüedad y arquitectura del instituto, no se ha podido reducir el número de alumnos en todos los grupos con el fin de mantener la suficiente distancia de seguridad en clase, aunque para ello se han habilitado todo tipo de espacios disponibles, como el gimnasio, laboratorio y otras aulas específicas. Por este motivo, el IES Sotomayor ha solicitado la semiprencialidad en algunos cursos o asignaturas en Bachillerato y 4º de ESO.
Concejalía de Educación
En el inicio del nuevo curso, la concejalía de Educación del Ayuntamiento de Manzanares ha agradecido el esfuerzo y esmero que han puesto los equipos docentes de todos los centros educativos de la localidad, que se suma al que realizaron en el último trimestre del pasado curso. La titular del área, Isabel Quintanilla, les ha felicitado por esa labor necesaria para iniciar esta etapa con tranquilidad.
La propia edil comprobó personalmente en los días previos al inicio del curso las medidas de prevención frente a la COVID-19 establecidas en cada centro y que se suman a las que el Ayuntamiento de Manzanares ha llevado a cabo durante este verano a petición de los mismos y que continúan con el refuerzo del personal de limpieza.
Todo ha estado a punto para que, desde este miércoles, se incorporen escalonadamente a las aulas unos 3.000 alumnos entre Educación Infantil (426), Primaria (1.065), ESO (850), Bachillerato y Formación Profesional y Personas Adultas (800).
