Las fiestas con diyey previstas para Nochebuena, Navidad, Nochevieja y Año Nuevo en la carpa municipal instalada en ‘La Pérgola’ se suspenden debido a la evolución de la pandemia por Covid. El Ayuntamiento de Manzanares toma esta “dolorosa decisión” al considerar que en estas fiestas no se puede garantizar el cumplimiento de todas las medidas sanitarias.
Solo unos días después de que el alcalde de Manzanares, Julián Nieva, anunciara que se mantenían todos los actos previstos para Navidad, la evolución de la pandemia por Covid-19, con cada vez mayor número de pruebas PCR y confinamientos que auguran otro importante aumento de casos en la localidad, ha hecho que el Ayuntamiento cancele las fiestas previstas en la carpa los viernes y sábados por la noche en los fines de semana de Nochebuena y Nochevieja. “Son un factor de riesgo que no podemos asumir. La salud y la economía de este pueblo están por encima de todo”, ha declarado la concejala de Festejos, Silvia Cebrián.
Para Nochebuena, en la noche del 24 al 25 de diciembre; y para Nochevieja, en la del 31 de diciembre al 1 de enero, se estaban vendiendo de forma anticipada las entradas, a 5 euros. Por su parte, para las fiestas de los sábados 25 y 1, había entrada gratuita. Aunque el aforo máximo previsto era de 1.000 personas, el aumento de contagios y la dificultad de garantizar el cumplimiento de todas las medidas preventivas frente a la Covid-19, han llevado a tomar una decisión que la concejala de Festejos, Silvia Cebrián, considera “muy dolorosa”.
El Ayuntamiento, que tenía ya todo previsto y organizado para ofrecer esta alternativa de diversión en noches tan especiales, devolverá el importe de las entradas ya adquiridas en próximos días. No obstante, el ritmo de venta era más flojo que en otras ocasiones debido a la incertidumbre que estaba generando el aumento de casos de Covid en la comarca. Apenas se habían vendido un centenar.
Lo que sí mantiene Festejos es la chocolatada con churros de este martes, 21 de diciembre, a las 16:30 horas en la carpa puesto que sí se pueden cumplir todas las medidas sanitarias, ya que en sus 800 metros cuadrados solo habrá doscientos asistentes que estarán lo suficientemente separados. Además, aunque contará con música en directo para amenizar la merienda, será sin baile.
“Vamos a organizar todas las actividades donde podamos controlar el aforo, haya suficiente distancia interpersonal y se pueda hacer un control exhausto de las medidas de seguridad”, según Cebrián.
Del resto de actos previstos se decidirá en función de cómo evolucionen los datos de contagios y de lo que determinen las autoridades sanitarias. En principio, el Ayuntamiento sigue adelante con la Cabalgata de Reyes y busca fórmulas que garanticen, por ejemplo, que se pueda disfrutar de forma segura de eventos como Diverinfancia en el Pabellón Ferial.